David y Jack
-Hola-dijo, el chico con una sonrisa.
-Hola-saludo Andrea, aunque estaba un poco aturdida por la situación.
-Me llamo Jack- dijo el chico a la vez que le daba la mano.
-Yo Andrea-tartamudeo ella, pero le dio la mano con una sonrisa.
-Andrea, que bonito nombre-dijo el chico aun con esa sonrisa.
-Muchas Gracias-dijo Andrea, si antes tenía la cara rosa ahora era roja como el tomate.
-Entramos-dijo Quil para salir de la situación.
-Si- dijimos al unisonó.
Andrea se puso a mi lado al entrar en casa.
-Hola-dije con una sonrisa.
-Hola-dijeron, Emily, Sam y otro chico más.
-Como veo habéis conocido a Jack-dijo con una sonrisa.
-Si-dijimos.
-Pues os voy a presentar a David- dijo, enseñándonos con la mano al chico que estaba al lado de Jack, se parecían mucho hasta diría que eran…
-Son hermanos-siguió diciendo Sam, sacándome de mis pensamientos y robándome la palabra.
- Ah, se parecen mucho-dije con una sonrisa.
-Yo soy Claire y ella es Andrea-dije enseñando con la mano a Andrea.
-Mucho gusto-dijeron los hermanos al unisonó, dándonos la mano.
Jack empezó una charla con Andrea, Sam y Emily tenían una charla con David. Era el mejor momento para hablar con Quil.
-¿Jack se imprimió de Andrea?-solté de una vez para ir al grano.
-Si-respondió clavándome esos ojazos que hacían que las mariposas revolotearan en mí estomago.
-¿Y qué vamos hacer ahora?-pregunte hundiéndome en esos ojazos aun mas.
-¿Cómo?-pregunto confuso.
-Vamos a tener que explicarle a Andrea sobre los lobos, ella no sabe nada de este mundo- dije, aun clavada en esos ojazos negros que tanto me gustaban.
-¡Tengo una idea!-dijo con una sonrisa y sacándome de mis pensamientos.
-¿Cuál?-pregunte, aunque todavía estaba en el planeta de “Yupi”
-Podemos preguntarle a Nessie, ¿Cómo lo hizo con Brenda? Y nos salimos de dudas-dijo con una sonrisa.
Era verdad cuando Seth se imprimió de Brenda ella no sabía nada de este mundo y ahora ellos vivían en una casa cerca de la casa de Billy.
-Si es una buena idea, pero no puedo dejar a Andrea sola con Jack, el no sabe que ella no sabe nada de este mundo-dije y todas mis esperanzas se fueron.
-Creo que lo mejor es que me lo dejes en mis manos-dije con una sonrisa y una cara más que convincente.
-¿Podrás manejar esta situación?-pregunto.
-Si-dije con la misma cara.
Estuvimos en silencio en unos segundos, iba a hablar para romper el hielo.
-¿Entonces la fiesta es porque ellos se van a unir a la manada?-pregunte con una sonrisa.
-No, es mejor que te lo explique Emily-dijo con una sonrisa.
Estaba algo confusa por la situación pero de pronto me volvió a clavar esos ojazos que hacían que volara a otro planeta y olvidarme del alrededor, me junte a él y rodee su cuello con mis brazos, Quil puso sus manos en mi cintura y me arrimo mucho mas a él, cuando entrabamos en esa situación éramos muy difícil de parar, pero no me importaba, me encantaba estar así con él, me podría estar toda la vida entre sus brazos y nunca me cansaría. Pero de pronto oímos un carraspeo que nos obligo a separarnos.
-Tenemos que irnos chicas-dijo Emily con una sonrisa.
A Emily se tomaba con calma todos nuestros descuidos delante de ellos pero lo que era Sam, siempre ponía una cara seria. Pero en el fondo yo sabía que él sabía que no había otro chico mejor que Quil.
-¿Tenemos?-pregunte confusa.
-Si, vamos hacer un baile para elegir al rey y la reina de la noche, hoy es el cumpleaños de Alice…, te lo explico en el camino-dijo con una sonrisa.
-Mi querida Nessie, está detrás de todo esto, ¿eh?-dije en forma de sarcasmo.
-Si- dijo con una sonrisa.
-No hay más que hablar, vámonos-dijo cogiéndome del brazo y separándome de Quil.
No me gustaba un pelo separarme de Quil pero si me iba con Emily podría evitar que Andrea se enterara del secreto. Andrea ya estaba esperándome al lado de la puerta, subimos al coche y fuimos camino a la casa de Nessie.
-¿Qué te ha parecido Jack?-pregunto Emily para romper el silencio.
-Es un chico encantador-dijo Andrea con una sonrisa y los ojos brillantes.
-Y guapo también, ¿eh?- dijo carcajeándose.
-Si-respondió mi amiga ruborizada.
Tenía que parar esta situación antes de que a Emily se le fuera de las manos. Pero la suerte estaba de mi parte y antes de que Emily fuera preguntarle otra cosa sin sentido a Andrea llegamos a casa de Nessie. Nos bajamos del coche y antes de que tocara el timbre, Alice nos abrió la puerta con una de sus enormes sonrisas.
-¡Ya llegaron las ultimas!- grito, diciéndonos con la mano que entráramos.
-¡Ya puedo empezar con mi cumpleaños!-grito dando saltillos y dando palmas.
Era más que seguro que este día y va ser más que largo.